Estoy preocupada, creo que tengo una mezcla de Síndrome Imelda y Síndrome de Diógenes. Me explico: me encantan los zapatos y acumulo, acumulo y acumulo. Guardo hasta esos imposibles, los que me hacen rozaduras o me quedan grandes.
El otro día vinieron los carpinteros a arreglar los armarios. Cuando vaciaron el mío, el tipo exclamó "¿pero le da tiempo a ponerse todo eso????" Y me dio tanta vergüenza que he decidido hacer una limpieza huracanada, sin piedad.
Para empezar: regalo unos zapatos del 36, salón negros de Bimba&Lola. Si aguzáis la vista los veréis entre el montón. Son ideales pero me quedan grandes (debo tener un 35 y medio...) ¿Alguna tiene un 36?
ADJUDICADOS A MI CUÑÁ
ResponderEliminarno me sirven, ya lo siento, pero has fotografiado los zapatos que tenemos iguales, jajaja
ResponderEliminarDebemos ser las únicas en Espagna con esos zapatos!! Tienes un gusto exquisito para el calzado
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