El agua es vida

Cuando hace unos meses fuimos al cine a ver "Ágora", comentamos que la naturaleza del ser humano es bélica, la religión es sólo una excusa para liberar esos instintos, como en otras ocasiones lo han sido las luchas territoriales, ideológicas e incluso el fútbol. Y Fátima, que es bióloga, comentó que ahora la excusa era la lucha por el agua, como recurso escaso que es (veamos el ejemplo del muro en los asentamientos palestinos, construido dejando el agua en un lado).

Pues exactamente ese es el argumento de la última película de Icíar Bollaín, "También la lluvia", rodada en más de 70 localizaciones diferentes y con más de 400 extras. La película, ambientada en Bolivia, se centra en la llamada Guerra del agua, un conflicto social que se vivió entre enero y abril de 2000, en la ciudad de Cochabamba, cuando la empresa norteamericana Bechtel intentó subir el precio del agua, lo que provocó unas violentas revueltas populares.

La película, protagonizado entre otros por Luis Tosar, Gael García Bernal (ummm), Karra Elejalde, Emma Suárez y Raúl Arévalo, se está montando ahora en Madrid, así que aún tendremos que esperar unos meses para su estreno.


Mientras tanto, aquí sigue lloviendo y los pantanos están al 70%, qué alivio...