Internet nos parece lo MÁS: si no estás en las redes sociales no existes, si tu marca no aparece en espontáneo en los blogs, no es trendy, y si no sabes lo que es Foursquare estás hecho un viejuno.
Pero no nos engañemos, Internet es como la plaza del pueblo.
Antes sacábamos las sillas a la puerta de casa y los secretos y cotilleos iban boca oreja, calle arriba y calle abajo. Nadie "sabía" pero todos "sabían". Fulanita de Tal ha dicho, Menganito de Cual ha hecho. Pues hoy, como no podemos vestirnos de domingo e irnos a la Plaza, volcamos en la red nuestros dimes y diretes. El último ejemplo lo hemos vivido en el colegio, donde a una niña (la gordi de la clase) la han machacado colgando fotos suyas donde sale poco favorecida. Es lo mismo que hacían nuestros abuelos en el patio del colegio, pero la enorme difusión e inmediatez que da la red hace que los rumores ardan como la pólvora en tiempo record.
El peligro somos nosotros mismos, no las nuevas tecnologías. Seguro que en las cuevas también hacían pintadas al lado del búfalo....
No hay comentarios:
Publicar un comentario